jueves, 11 de mayo de 2017

Ciclo de Escuelas de Historia de España


¿España, potencia imperialista

 o país dominado?





Iniciamos un nuevo ciclo de Escuelas de Marxismo, en el que vamos a sintetizar los contenidos desarrollados en 13 escuelas celebradas durante 2006 y 2007, dedicadas a comprender las claves de la historia de España y como influyen decisivamente en el presente.

Vamos a enfrentarnos a una pregunta del mayor interés y actualidad: ¿Es nuestro país, como afirma un amplio y variado sector de la izquierda que va desde el nacionalismo hasta los movimientos indigenistas de Iberoamérica, una potencia imperialista? ¿O, por el contrario, somos en realidad, pese a todo el desarrollo alcanzado en las últimas décadas, un país dominado por el imperialismo?

Responder a esta cuestión clave va a ser el tema y el hilo conductor de este ciclo de tres Escuelas Zonales, que culminará en una Escuela Central en Agosto. Vamos a abordarlo enfrentándonos al problema de una forma objetiva, utilizando y viendo cómo funcionan en la práctica los conceptos científicos del marxismo, poniéndolos en relación con nuestra propia historia.

La primera de las escuelas de este ciclo lleva por título “El siglo XIX español. De la Guerra de la Independencia al desastre del 98”.

Es en el siglo XIX donde España se convierte en territorio de intervención de las principales potencias, imponiendo una creciente subordinación política y militar, y un desarrollo económico que entregará las principales riquezas nacionales al capital extranjero.

Tal y como plantea el gran hispanista francés Pierre Vilar en su libro Historia de España: “Políticamente débil, España será tratada como zona de influencia. La intervención de 1823, las posiciones adoptadas respecto al carlismo, ‘los matrimonios españoles’, las intrigas en torno a Espartero y Narváez son otros tantos episodios de la rivalidad anglo-francesa en torno a España.... España escapó a la suerte de satélite que aceptó Portugal, pero sus riquezas y su posición no cesaron de atraer sobre ella las intrigas extranjeras”.

No hay comentarios:

Publicar un comentario